FSC-CCOO País Valencià | 19 d?abril 2024.

UGT y ANEA firman ‘de tapadillo’ un preacuerdo estatal de Convenio Estatal de Transporte Sanitario que no resuelve los problemas del sector

    CCOO rechaza la firma del convenio extraestatutario que ha modificado todo para empeorarlo o no cambiar nada.

    03/07/2020.
    Transporte sanitario - foto de pixabay

    Transporte sanitario - foto de pixabay

    UGT y la patronal de transporte sanitario ANEA han suscrito un preacuerdo de convenio estatal de transporte sanitario extraestatutario, que modificaría el texto anterior de forma execrable, ya que perjudica gravemente los intereses de la clase trabajadora del sector del transporte sanitario. Además, esta forma de negociar supone un comportamiento falto de ética hacia otras organizaciones sindicales imprescindibles para la firma de un convenio.

    En opinión de CCOO, es, sin duda, una falta de respeto, un comportamiento poco ético y una vulneración institucional a la que las partes de un convenio se deben. Se han sobrepasado ampliamente las líneas de la legalidad de manera consciente. Solo se puede calificar de despropósito.

    El preacuerdo, que fuera de la mesa de negociación no será válido ni estatutario, ha generado una crisis en el interno de UGT. CCOO, al igual que el otro sindicato con representación en la mesa, USO, ha quedado materialmente expulsada de la negociación real, sin ser convocada a las conversaciones, ni ser escuchadas sus propuestas, ni tener la oportunidad de aportar soluciones a problemas viejos: la disputa de las horas de presencia y la irregularidad de los contratos en prácticas.

    Este preacuerdo es el resultado de no haber querido discutir en mesa de negociación el necesario acoplamiento a la legalidad que necesita el sector. Su contenido prevé eludir sentencias respecto a la jornada, tanto del ámbito judicial español como del Tribunal Europeo, en lo que solo puede ser calificado como una obsesión ciega por seguir con la mala praxis de concatenar jornadas interminables. A la jornada ordinaria de 40 horas habría que sumar no solo las horas de presencia, que no son tales, sino lo que en el preacuerdo se denomina "horas suplementarias". Ninguna de ellas presupone en principio excesos de jornada, pero el resultado real son jornadas de 12 horas de media diaria y 2.600 horas anuales.

    El preacuerdo no resuelve los problemas del sector. Se ha modificado todo -incluida su estructura-, para realmente no cambiar nada. Y, en ese sentido, CCOO llama a ANEA y a UGT a la responsabilidad. Porque la realidad es que las horas de presencia llevan instaladas en el sector prácticamente desde el nacimiento del actual sistema concesional en el que se desarrolla la actividad. Todos y cada uno de los componentes del sector conocen ese histórico, incluidas las Administraciones Públicas, que asumieron esta mala praxis. Desde CCOO, hemos venido reivindicando desde la conformación de la mesa negociadora, y antes incluso de que las sentencias del TJUE y el TS lo dijeran, la erradicación de estas horas que, tal y como establecen dichas sentencias, son horas de trabajo efectivo en los términos establecidos en el propio RD 1561/95.

    Este era el momento de encontrar soluciones, con voluntad de verdadero cambio, y de asumir lo que de manera ineludible disponen unas sentencias que, entre otras cosas, están ahí por la ambición de algunos empresarios de utilizar el método de 'forfatear' las horas de disponibilidad, para abonarlas en algunos casos a la mitad de su precio como hora ordinaria.

    Las malas praxis traen estas consecuencias. Como también las ha traído la contratación en prácticas, otro de los grandes problemas de las personas trabajadoras del sector y que tampoco soluciona el preacuerdo suscrito. Uno de los efectos que el RD 836/12 tuvo fue el de "regalarle" a las empresas la contratación en prácticas, de la que algunas empresas han abusado, tal y como se demuestra en diferentes sentencias de juzgados de primera instancia.

    Otra de las situaciones que tampoco resuelve este preacuerdo es el agregado de tareas y responsabilidades que para la profesión han venido suponiendo las exigencias de requisitos formativos, que no pueden quedarse únicamente en el cambio de denominación de una categoría o una nueva ubicación de grupos profesionales. Y es que el preacuerdo quiere hacer ver que el problema reside solo en tener una categoría más aceptada socialmente y mejor valorada. Pero no es todo nomenclatura, porque en el mundo del trabajo lo que se reconoce es el “quantum”. Y, en ese sentido, a los profesionales del sector no se les ha venido pagando por un nombre de categoría más aparente, sino en todo caso porque trabajan más horas.

    Este preacuerdo, insistimos, no arregla nada en materia de jornada y uso ilegal de las horas de presencia, ni soluciona el abuso de la contratación en prácticas, ni da la valoración cuantitativa y cualitativa que el colectivo de TES viene demandado. Es decir, se quiere vestir de nuevo convenio un instrumento para seguir igual en ilegalidad y peor en condiciones, porque además se han añadido nuevas obligaciones a las personas trabajadoras.

    Además, la firma se da en el momento más inoportuno, cuando el país intenta recuperarse de una pandemia y reconstruirse en lo social, económico y sanitario para afrontar un posible rebrote y con el futuro del estado de bienestar en juego. Obviamente, no parece el mejor el momento para provocar un conflicto laboral que será ineludible si se pretende sacar adelante el convenio sin consenso. CCOO defenderá la dignidad del transporte sanitario y sus convenios colectivos por cualquier vía.